Se celebra el 25 de octubre el día de Internet en España. No es que haya mucho que celebrar, la verdad. Más bien se coge ese día como excusa para hablar del tema y, como dicen los progres, para “concienciar”. Por ello, diversas organizaciones se apresuran a sacar sus informes y diagnósticos sobre la Internet en España. Podemos resumirlos brevemente: fracaso absoluto de los flamantes y rimbombantes planes sobre la Sociedad de la Información, la e-España o la Canarias Digital. España sigue a la cola de Europa en lo que se refiere a acceso, implantación y uso de las nuevas tecnologías y de Internet: dos tercios de los españoles (y de las españolas sobre todo) está fuera de la Red y no la usa. Así de claro y desconectado está el panorama español respecto a Internet y las nuevas tecnologías.
Dentro del páramo español, Canarias sin embargo no está tan mal situada como han señalado algunos medios estos últimos días. Es cierto que está por debajo de la media española (34%), pero sólo un poco por debajo, por lo que casi un tercio (32%) de los canarios son usuarios de Internet. Lo malo es que esta proporción se mantiene estable desde hace al menos 2 o 3 años, estancamiento que es señal de que no se han realizado acciones destinadas al fomento y al desarrollo de la Sociedad de la Información en Canarias, por muchos anuncios que nos pongan en las televisiones. El panorama es negro si los objetivos -proclamados por el Gobierno regional- es acercarnos a las medias europeas, porque ello supone darle la vuelta a la situación y, la verdad, no se ve a este Gobierno con capacidad de darle la vuelta a nada. De un tercio de usuarios de Internet se debería pasar a dos tercios, lo que supone incorporar a un tercio más de la población al uso de las nuevas tecnologías: duplicar la sociedad de la información en Canarias. Eso es casi imposible.
Si en el caso del Gobierno nacional, los datos sobre la penosa situación de las TIC e Intenet obligan a reconocer el fracaso de las políticas emprendidas en años anteriores y por gobiernos anteriores, como los planes España siglo XXI o e-España, en el caso de Canarias hay que reconocer, como ya se ha hecho, el fracaso del Plan CanariasDigital, que de hecho apenas era otra cosa que un plan de renovación del parque informático de la administración regional, aderezado con algunos programas de difusión y apoyo a las nuevas tecnologías, como la ciberguagua, una buena idea que murió porque los tiempos no eran buenos ni para la lírica ni para la épica. El paso de Luis Soria por la Consejería de Industria e Innovación Tecnológica no fue bueno para CanariasDigital y los populares no supieron definir y desarrollar política alguna al respecto, pese a tener como responsable a un reputado experto en nuevas tecnologías. Más tiempo perdido y más recursos malgastados.
El resultado es el que es: dos tercios de la sociedad canaria está excluida del uso de las nuevas tecnologías y esta “brecha digital” no tiene visos de disminuir, ni se ven políticas destinadas a ello por parte de los poderes públicos, salvo pequeñas y loables iniciativas como la Ficit de Gáldar, LasPalmas Party o Cabeza de Perro de Tenerife. Las causas de esta “desconexión” canaria hay que buscarlas en dos ámbitos: la infoestructura -el precio del acceso a las redes es caro, entre los más caros de Europa, y hay problemas de cobertura de las redes en zonas de distintas islas- y la infocultura -una gran mayoría de la población canaria es analfabeta respecto a las nuevas tecnologías e Internet, especialmente los de menor nivel de estudios y mayor edad y las mujeres.
Día de Internet. Se ha de hablar de lo que España y Canarias está perdiendo debido al analfabetismo digital y al retraso de las inversiones en I+D+i, pues de aquellos polvos vienen estos lodos, como suele suceder. La hipermodernidad se mide en uso de las nuevas tecnologías y acceso a las redes. Canarias sigue siendo analógica y a duras penas es moderna. El Día de Internet pasará con más pena que gloria.
Pese a todo, celebremos el día de Internet ese tercio de sufridos internautas canariensis, que, según los datos, son mayoritariamente hombres, de clase media, jóvenes y con estudios superiores. Pidamos más calidad de acceso, más banda ancha y mayor velocidad a menor precio, más recursos gratuítos de Internet a disposición de la ciudadanía -por ejemplo, en oficinas de correos y en bibliotecas o centros culturales-, más servicios completamente on line por parte de las administraciones públicas, más ordenadores a disposición de los alumnos y no de los profesores en las escuelas e institutos, mejores servicios de internet en las universidades y centros de investigación. Y campañas de alfabetización digital para los de mayor edad y menor nivel de estudios, mujeres sobre todo.
A ver si el 25 de octubre de 2006, cuando mi ahijado cumpla 15 años, los internautas canarios y españoles dan otro perfil. Por ahora, poco Internet para un día entero. Con media jornada vamos más que despachados.
Teresa González de la Fe
Publicado en
CanariasAhora.com