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La Opinión de Tenerife que en el barrio de La Salud de la capital chicharrera, ha sido agredida una mujer por llevar el pañuelo (hijab) típico de las musulmanas. Se da la circunstancia de que la agredida, de religión musulmana, es tinerfeña y convertida al islam, pero el hecho sería igual de condenable si hubiera nacido en cualquier otro lugar del mundo. La paliza se la propinaron cuatro vecinos, algunos de ellos menores de edad, a plena luz del día y a la vista de vecinos y viandantes, ninguno de los cuales llamó a la policía ni intervino en su ayuda.
La agredida fue objeto de "lindezas" como "mora de mierda, sin papeles", "hanmahanma", "piojosa, vete al desierto", "terrorista, Bin Laden", o "ladrona, que vienes robar el trabajo a los canarios". Este repertorio debe formar parte de la Identidad Canaria que predican los organizadores de la pasada manifestación racista, bendecida por ATI-CC y por el PP. Aunque los hechos han sido denunciados, así como otra agresión anterior sufrida por la misma mujer, parece que no prosperan mucho las diligencias en los ámbitos judiciales, según se queja el abogado de la víctima.
¿Cuántas de estas agresiones se están produciendo sin que salten a los medios de comunicación? Nos tememos que, en este caso, el asunto ha llegado a conocimiento público por ser la agredida una canaria. Si hubiera nacido en Marruecos o en cualquier otro país islámico, es probable que no nos hubieramos enterado por no ser noticia.
Las monjitas van con sus velos por la calle y a todos nos parece bien. Los trajes típicos femeninos de cada una de las islas incorporan un velo a la cabeza. Nuestras bisabuelas no pisaban la calle sin sus pañuelos o mantillas y no hace demasiado tiempo las mujeres no podían entrar en las iglesias católicas sin llevar la cabeza velada.
No es que me gusten los velos y demás atuendos tradicionales que esconden a las mujeres. Pero mucho menos me gustan los ataques racistas. Deben estar contentos los señores de la Identidad Canaria: su manifestación ha sido un éxito.
Macarronesia: naturaleza cálida y racista. Venga a vernos al paraíso tropical si es usted europeo y cristiano. Si no lo es, sepa que sólo se admiten musulmanes inmensamente ricos, cargados de petrodólares.
(Nota: las fotos están enlazadas desde la web de la
FEDAC)